jueves, 9 de junio de 2016

Temporal interminable

La imagen del título de este blog refleja lo que nos está pasando desde hace unas seis semanas. Llueve fuerte, llueve más despacio, después sale el sol un rato, de pronto sopla don viento con enormes ganas. Amanece con una gran helada, y vuelve a llover fuerte y así vamos. Mientras tanto, los caminos de tierra se van complicando. Barro, huellones, algún pantano. Lo mismo pasa con las mangas. Los corrales son un pisadero y en los que todavía no hay un pisadero, la gente trata de no encerrar para no estropearlos más. Es lógico que el laburo se resienta. Tenemos montones de vacas y toros por revisar todavía, pero solo vamos haciendo las urgencias a duras penas, envueltos en ponchos y camperas impermeables.

Lo bueno es que nos va quedando tiempo libre para escribir, encarar los proyectos de teatro y leer y estudiar sin apuro. Cosas lindas pero que no nos dan de comer.

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