Un día cualquiera me encontré con Pedro en el correo. En nuestro pueblo no hay cartero. Cada uno debe ir hasta la estafeta y retirar su correspondencia, así que este suele ser un lugar de encuentros.
La cuestión es que Pedro, mientras esperabamos ser atendidos, me dijo que le habían regalado una gatita "de Angora" y que la quería operar (castrar). Quedamos en que lo haríamos cuando tuviera unos 7 u 8 meses de vida.
A partir de entonces, cada vez que nos cruzabamos, Pedro me hacía acordar de "Minina" como la habían bautizado. Pasaron unos cuatro meses. Una tarde de lluvia, los días que generalmente aprovecho para hacer cirugía en pequeños, decidí por fin ir a buscar a Minina para operarla. Cuando llegué a la casa me encontré con una hermosa gata blanca, toda lavada y perfumada, con el pelo bien largo y esponjoso, y un collarcito rosa muy petitero (ja... esta palabra algunos no la conocerán). La despedida fué como con un pariente, la mujer lloró un poco mientras le hacía los últimos mimos.
Llegué a la veterinaria, preparé todo para la operación y le apliqué la anestesia. Todo iba bien. Como pasa muchas veces, vomitó antes de quedar en el plano que uno precisa para la cirugía. Por fin la tendí y sujeté en la camilla. La pelé y desinfecté el área quirúrgica. Luego hice una prolija incisión por línea media y me asomé al abdomen.
¡Y ahí la sorpresa! De un vistazo pude ver que Minina... ¡No tenía útero ni ovarios! Enseguida busqué entre los pelos del perineo y me encontré dos hermosos huevos como de paloma ¡Era un macho! ¡Minina era un macho!
Suturé todo y la llevé de vuelta a casa. Al llegar me recibieron con ansiedad. Mientras la mujer la acomodaba suavemente en su camita, Pedro me preguntó: "¿Y? ¿Como fué la cosa?" "¡Bién!" Dije yo mientras no paraba de reirme "Cuando se le cure la panza lo castramos... Minina es un hombrecito"
Y esto que les conté no me pasó cuando era nuevo en la profesión. Me pasó con unos 20 años de trabajo y centenares de ovariectomías hechas, lo que confirma que nunca estaremos libres de ser bolas tristes en algún momento
La cuestión es que Pedro, mientras esperabamos ser atendidos, me dijo que le habían regalado una gatita "de Angora" y que la quería operar (castrar). Quedamos en que lo haríamos cuando tuviera unos 7 u 8 meses de vida.
A partir de entonces, cada vez que nos cruzabamos, Pedro me hacía acordar de "Minina" como la habían bautizado. Pasaron unos cuatro meses. Una tarde de lluvia, los días que generalmente aprovecho para hacer cirugía en pequeños, decidí por fin ir a buscar a Minina para operarla. Cuando llegué a la casa me encontré con una hermosa gata blanca, toda lavada y perfumada, con el pelo bien largo y esponjoso, y un collarcito rosa muy petitero (ja... esta palabra algunos no la conocerán). La despedida fué como con un pariente, la mujer lloró un poco mientras le hacía los últimos mimos.
Llegué a la veterinaria, preparé todo para la operación y le apliqué la anestesia. Todo iba bien. Como pasa muchas veces, vomitó antes de quedar en el plano que uno precisa para la cirugía. Por fin la tendí y sujeté en la camilla. La pelé y desinfecté el área quirúrgica. Luego hice una prolija incisión por línea media y me asomé al abdomen.
¡Y ahí la sorpresa! De un vistazo pude ver que Minina... ¡No tenía útero ni ovarios! Enseguida busqué entre los pelos del perineo y me encontré dos hermosos huevos como de paloma ¡Era un macho! ¡Minina era un macho!
Suturé todo y la llevé de vuelta a casa. Al llegar me recibieron con ansiedad. Mientras la mujer la acomodaba suavemente en su camita, Pedro me preguntó: "¿Y? ¿Como fué la cosa?" "¡Bién!" Dije yo mientras no paraba de reirme "Cuando se le cure la panza lo castramos... Minina es un hombrecito"
Y esto que les conté no me pasó cuando era nuevo en la profesión. Me pasó con unos 20 años de trabajo y centenares de ovariectomías hechas, lo que confirma que nunca estaremos libres de ser bolas tristes en algún momento
jajaja muy bueno doc, te pido que por favor no te pase esto con algún ser humano.....jajaja
ResponderEliminarUn abrazo grande!!!
Jajaja que anecdota!
ResponderEliminarMuy bueno su blog.
Saludos!
Muy bueno colega !!!!!!!!
ResponderEliminarNOS hemos reido mucho con mi familia !!
Gracias por sus aportes por estos pagos me han pasado cosas similares jaja
Feliz Dia!!
Lisandro Angelino desde concepcion del uruguay entre rios
jajaja muy bueno el blog saludos
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