martes, 15 de febrero de 2011

Otro día negro

Era un trabajito simple y terminó fatal.
Solo tenía que tratar un novillo con queratoconjuntivitis. En estos casos saco sangre del mismo animal y la inyecto en ambos párpados superiores. En los inferiores aplico oxitetraciclina.
El encargado tenía que entrar rollos en el otro campo, así que me dejo el animal encerrado en un callejón al lado de la manga.
Llegé contento. Una tarea facil. Encerré el novillo y me encuentro con que el cepo no andaba
¡Y bueno! ¡No pasa nada!
Le até una soga en el cogote, pero en ese momento, el candidato saltó y me dió un cabezaso en las costillas que todavía hoy, cuatro días despues, me está molestando.
En el mismo salto se dió vuelta en el aire y metió una pata entre la tabla de abajo y el piso, de tal manera que ya no se pudo parar más y quedó inmovilizado.
¡Uh! Pensé ¿Y ahora? Yo solo en el campo y con el animal sin poder salir del apretón y pateando como loco.
Me puse a desarmar las tablas de la manga, sacando algunos tornillos y cortando otros. Sudaba como un beduino emponchado. Terminé de retirar tuercas y arandelas, pero no hubo caso de poder sacar la tabla, ni la pata del candidato.
Se me ocurrió entonces atarle las manos y tirarlo con la camioneta. Despues de nuevos esfuerzos solo conseguí correr al bicho medio cuerpo hacia afuera de la manga, pero su pata quedó aún peor, y ya daba señales de agotamiento. De pronto una enorme bocanada de líquido ruminal apareció por su hocico y en unos minutos mas dió su última patada y partió para los cielos bovinos.
Yo me había pasado casi una hora trabajando y estaba cansado, rabioso y frustrado. Me senté en las tablas y despues de un rato largo agarré el teléfono y llamé al encargado.

3 comentarios:

  1. En todas las profesiones hay accidentes y ninguno es agradable de ver o relatar.
    Pero de todo hay que sacar enseñanza y creo que la de este accidente es que hay que trabajar con más personal, no se le puede dejar un animal irracional a un profesional en solitario, que lo haga todo y sin la ayuda de algun peon que le heche una mano e el trabajo.
    Saludos de Gabriel.

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  2. Y el encargado era como llamar a O.MENDEZ o mas tranquilo,ja,ja,ja,ja. Abrazo!!!

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  3. Hola Doc, que feo cuando pasan estas cosas, uno no lo puede creer. Aveces nos sometemos a trabajar en condiciones donde arriesgamos nuestra integridad física y la del animal, pero bue.... a veces no queda otra.
    Un abrazo!!!!!!!!!!!!!!!

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