lunes, 10 de diciembre de 2012

Tiempos movidos


Y un domingo volví al rincón del blog. En estos días han pasado montones de cosas que me tuvieron ocupado. Solo falta un tirón hasta la Navidad, y creo que después volveré a caminar más tranquilo y a tener más tiempo para escribir y seguir contando historias.
El trabajo en el campo parece haberse multiplicado. Nos llaman por urgencias de todo tipo. Ayer terminamos amputando la pata de un ternero con una fea fractura de metatarso, pero hemos asistido casos de meteorismo espumoso, muertes por enfermedades varias, heridas y problemas de casco en caballos, algunos partos distócicos, prolapsos, traumas de pene en toros y otras muchas delicias.
Además, están los trabajos programados de reproducción. Tanto los rodeos de Inseminación a tiempo fijo, como los trabajos de Transferencia de embriones que ya les he contado en otras notas.
En noviembre apareció “Animales que hablan, que vuelan y que caminan”, mi segundo libro. Es una selección de relatos del estilo de los que ustedes acostumbran encontrar en este espacio. Voy a ver si cuando pasen estas semanas locas puedo armar una linda presentación. Con este libro la emoción no fue tan intensa como con el primero, pero de todas maneras, el primer vistazo, aspirar el aroma encerrado entre sus páginas y poder sostenerlo en las manos, son sensaciones incomparables.
Y llegaron los trabajos teatrales de fin de año. Esta vez estoy preparando una obra para la Escuela 27 que se llama “La maestra nueva”, otra con los egresados del secundario, “Amor imposible”; la tercera con los bailarines de la Peña folklórica, llamada “Un marido celoso” y me pusieron a actuar de Príncipe Felipe en la presentación del colegio primario. Por si fuera poco, el domingo 23 haremos el Pesebre viviente. Una linda representación en la que hasta se ve el parto de la Virgen María, de una manera tan sutil y delicada, que muchos de los presentes se llenan de emoción hasta las lágrimas. Todo esto ocupa horas y horas, muchas veces de noche, de ensayos y preparativos.
Y queda la redacción de las Gacetillas mensuales que enviamos desde la Veterinaria, las actas de las reuniones de Intervet, nuestro Grupo de Intercambio Veterinario, y el tiempo dedicado a la familia, el más gratificante y delicioso.
En fin. Son tiempos movidos tal como dije al principio. Pero “Sarna con gusto, no pica”
  

1 comentario:

  1. vos lo digiste sarna con gusto,.... lo bueno que te haces un tiempo para vos; muy buena la foto de las karakul.
    GM

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Un Veterinario y las Mujeres Guerreras

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